Se produce cuándo los sucesos de la vida, ya sea de orden físico o psíquico, superan la capacidad para afrontarlos.
Sin embargo pocos saben que el estrés afecta “físicamente” al organismo por ejemplo al sistema cardiovascular que se ve obligado a trabajar de forma forzada y al sistema inmunológico que reduce su efectividad en favor de otras funciones orgánicas. Esto produce una baja en las defensas contra las infecciones y las enfermedades.
Algunos alimentos empeoran el estrés y otros que lo mejoran, tales como las almendras, nueces, piñón, garbanzo y germen, (así como aumentar el consumo de vitamina C y B). Los productos que empeoran los niveles de estrés son el café, el alcohol y el azúcar refinada.